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Se devuelve luego de hacer algunas compras y otra vez mira a esos hombres intimidantes en la esquina, esta vez no le dicen nada molesto y de alguna forma parece que quieren ser su amigo. –Es probable que haya sido una especie de iniciación por la que tienen que pasar los nuevos–, piensa mientras se acerca a ellos. Luego de darle algo de dinero hacer que se rieran de sus defectos físicos, ya era parte del grupo. Ahora solo tiene que llevar a uno de ellos a su casa para mostrarle a su chica que tiene nuevas amistades como ella le pidió. Y se pone mejor cuando la zorra de su novia se come la polla negra del tío que acaba de llevar, solo puede pensar en lo feliz que se ve la jovencita mientras le hace una mamada a un hombre negro y luego como estalla en orgasmos mientras le está follando el coño.